“[Twitter is] such as mess — it’s as if they drove a clown car into a gold mine and fell in.”

Esa es la descripción que Mark Zuckeberg hace de Twitter en el libro Hatching Twitter de Nick Bilton.

Ayer Twitter anunció que el sistema de Favoritos iba a ser cambiado por un sistema de Likes. Las estrellas iban a ser reeemplazadas por corazones.

El problema no son los corazones o el cambio en sí, aunque obvio muchos se van a quedar ahi. Al final el problema y lo que más nos molesta es que Twitter parece estar copiando un elemento de Facebook con el afán de hacerse más parecido y por tanto, más accesible a un público mayor. Se le está olvidando que no es, ni nunca fue, un Facebook más breve y rápido. Es algo completamente diferente y mucho más poderoso en muchos sentidos.

Un posible indicio de por qué se toma esta decisión, aparte de los resultados financieros del Q3, es algo que Bilton describe en su libro. Relata el conflicto central de Twitter como la discrepancia de dos de los fundadores – Dorsey y Williams – sobre la visión fundamental de lo que el servicio debería ser. Dorsey veía Twitter como la manera de actualizar nuestro «status», la capacidad de decir lo que estás haciendo en el momento en que lo estás haciendo. Williams veía a Twitter como la manera de describir lo que sucede en el mundo a nuestro alrededor.

Dorsey es el actual CEO. Si esa visión es la que prevalece esto explica mucho. Lamentablemente esa visión personal e íntima se parece demasiado al papel que Facebook juega hoy en dia. Creo que ese es el problema fundamental de Twitter:

No se trata de lo que compartimos de nosotros, sino de la visión del mundo que compartimos a través del servicio.

Hacer lo segundo es MUCHO más complicado y explica por qué muy poca gente, comparativamente hablando, lo usa activamente y le saca tanto provecho.

Durante mucho tiempo pensé que Twitter podría servir de contrapeso al abrumador peso e influencia de Facebook dentro de los medios sociales. Lamentablemente creo que me equivoqué. Definitivamente Twitter no está a la altura, como compañía, de algo tan brutalmente eficiente y claro en su visión y objetivo como Facebook. Y esto no tiene que ver con la escala, que quede claro. Una visión clara le daría una posición muy fuerte en un nicho específico a Twitter y eso aseguraría su supervivencia y prosperidad por bastante tiempo.

Pero no es el caso. Eso no existe.

El verdadero problema es que la dirección de Twitter parece mostrar cada vez más una tremenda incomprensión sobre realmente qué es la plataforma y qué necesita para evolucionar. Esto lo he visto en todos los niveles y la verdad es que me aterra. Creo que la gente que trabaja en Twitter usa más Facebook que su misma plataforma.

La ola de quejas y protestas que ha despertado en ciertos círculos (no me refiero a la tradicional ola de rechazo a cualquier cambio) es solo un síntoma de que quizá la confianza que tenemos en la existencia continua de una plataforma que ha sido instrumental en el desarrollo de la web y los medios sociales modernos no tiene bases tan sólidas como quisiéramos.

Facebook ha intentado comprar Twitter dos veces. Quizá no haya tercera vez, simplemente porque Twitter voluntariamente decida convertirse en un apéndice de Facebook.

Ese dia la web va a perder algo valioso. Será un dia triste.

Sigo escribiendo.

¿Qué opinas de esta decisión de Twitter?