Hay veces que la frase «Elige tu veneno» tiene un significado literal, sobre todo cuando se habla de medios sociales. Hay muchos aspectos en los que esto es cierto, pero hay uno que es particularmente letal y común, sobre todo a nivel estratégico que es en donde los errores suelen ser tan grandes que son invisibles.

Me refiero a los dos extremos erróneos en los que puede caer una iniciativa en Medios Sociales:

Las Ventas Directas y los Likes/Seguidores.

Todos lo hemos visto con demasiada frecuencia: Proyectos de Medios Sociales que son usados como canal o plataforma de ventas directas. Esto no significa que no se pueda vender a través de medios sociales, pero sin duda para que esto suceda se tiene que usar una estrategia mucho más sofisticada en varias etapas. Difícilmente los mensajes promocionales descarados y un botón de venta va a funcionar.

Por otro lado, está la absurda fijación con los Likes o el tamaño del público o alcance como único parámetro de éxito. Ya hemos hablado de la enfermiza carrera tras los Likes y lo inútil de perseguir métricas de vanidad. Lo mismo aplica para esa preocupación obsesiva con el alcance. Hay muchas cosas más importantes que pueden señalar el fracaso u éxito de lo que estamos haciendo, siempre y cuando haya una estrategia con objetivos de negocio detrás.

En un caso se peca de buscar demasiado el aspecto de negocio, en el otro de no buscarlo en absoluto. En ambos casos el resultado para la marca o negocio es el mismo.

Un fracaso total.

Ambos extremos llevan al mismo destino, pero eso no significa que valga la pena tomar cualquiera de ellos, al contrario. Los verdaderos resultados están en un justo medio armónico que depende de la inteligencia y conocimiento que podamos aplicar para saber exactamente hacia dónde queremos llegar y cómo lo vamos a medir a cada paso del camino.

Es un cliché pero aqui si aplica eso de «El camino al Infierno está pavimentado de buenas intenciones». El camino hacia estos dos infiernos no es diferente.

Pero ninguna buena intención es sustituto de saber exactamente lo que estamos haciendo en el mundo digital.

Eso ya deberíamos saberlo de sobra.

Que tengan un gran inicio de semana.

Sigo escribiendo.

¿Cómo has podido evitar caer en cualquiera de estos extremos?