Hace dos años, el ambiente en los blogs y reuniones de la industria de marketing digital era un colectivo «Todos Vamos a Morir». Gran cantidad de gente estaba en actitud apocalíptica y previendo el fin del mundo como lo conocíamos. ¿La razón?
Hace dos años Facebook le apretó las tuercas a las marcas y empezó a reducir sustancialmente el alcance orgánico de las páginas. Aqui se escribió largamente sobre este tema, como recordarán. Sus razones eran claras y razonables en alguna medida, pero muchos dijeron que esa era la señal para que las marcas comenzaran a emigrar de Facebook a otras plataformas con más posibilidades. Incluso se habló de un renacimiento de la importancia de los sitios web. Muchas marcas se sintieron traicionadas cuando vieron que sus Likes se «devaluaban» peor que el peso ante el dólar. Todo esto era un caldo de cultivo ideal para una revolución en la cuál habría una gran fuga de clientes, actividad e ingresos para Facebook. ¿Quién podría aguantar cambios como estos?
A dos años de distancia podemos decir que nada de eso sucedió. No se quedó ni siquiera cerca.
La falta de alcance orgánico ha tenido un efecto nulo en la operación de las marcas en Facebook.
Según un estudio de 180,000 marcas en Facebook, Instagram y Twitter hecho por Quintly, una compañía de analíticas de medios sociales, las publicaciones de marcas en Facebook subieron 36% en 2015.
Y si vemos los resultados financieros de esta red social, veremos que sus ingresos por publicidad no solo están lejos de disminuir, sino que siguen aumentando de manera asombrosa.
No, las marcas no se fueron de Facebook, al contrario. Corrieron a abrazarla y le dieron más dinero todavía. ¿Resulta curioso o disfuncional? No realmente.
Las marcas necesitan a Facebook y no se van a ir. Es una simple cuestión de negocio. Al parecer el consenso es que el tiempo y dinero que están invirtiendo está redituando lo suficiente, sea cierto o no. Ya sea porque lo toman como un costo inevitable de hacer negocio, porque el ahorro comparado con medios tradicionales no es nada despreciable, o porque los beneficios compensan la inversión, no hay síntomas visibles de que las marcas se vayan a marchar de Facebook en un futuro cercano, al contrario.
Quizá haya asfixiado el alcance orgánico, pero en compensación Facebook ha ofrecido mejoras e innovaciones en la parte de publicidad que no podían imaginarse hace dos años. Si, claramente lo mejor que Facebook le ofrece a las marcas es pagado. Pero ese es el precio de querer estar en el centro comercial más grande de Internet.
Siempre lo he dicho, como marca no es lo mismo ser un usuario que un cliente de Facebook. La línea divisoria es muy clara. Es una tarjeta de crédito.
Misma que se va a tener que usar con bastante frecuencia.
Pero aún esto no es un problema. El problema sigue siendo si estamos obteniendo algo a cambio de nuestro dinero. Lamentablemente, en dos años eso no ha cambiado mucho. Todavía hay mucho camino que recorrer.
Sigo escribiendo.
¿Hoy en dia considerarías sacar tu marca de Facebook? ¿Por qué?